Once soldados muertos y siete heridos en una emboscada del NEP en Mindoro

Once soldados filipinos fueron abatidos y otros siete han resultado heridos este sábado durante una emboscada tendida por la guerrilla comunista del Nuevo Ejército del Pueblo (NEP) en una zona montañosa de Barangay Panaytayan, Mansalay, en Mindoro Oriental. Se trata de la mayor pérdida de vidas militares de este año en un solo enfrentamiento con las guerrillas.

El teniente coronel Romeo Brawner, de la oficina de información pública de las Fuerzas Armadas, declaró que el ataque se produjo a las 5.30, hora local, cuando los soldados estaban realizando "operaciones de despeje" como parte de las medidas instauradas por el Gobierno para garantizar la seguridad durante el periodo de campaña electoral para los comicios locales del próximo 26 de marzo. Los soldados fueron atrapados en una emboscada durante la cual se desencadenó un intenso tiroteó. Las tropas lograron mantener su posición durante tres horas, hasta que llegó una unidad de refuerzo, que forzó a los rebeldes a replegarse.
"Aunque estaban en desventaja frente al bien ubicado campamento terrorista, los soldados (...) lucharon hasta agotar, literalmente, la última bala"
aseguró el portavoz, quien dijo desconocer el número de bajas sufridas por los rebeldes y señaló que se está llevando a cabo una operación en la zona para localizar a los miembros huidos del NEP.

Las tropas habían sido desplegadas en la zona de la emboscada de hoy para impedir que los rebeldes extorsionen a candidatos y les exijan dinero a cambio de permitirles participar en las elecciones generales del próximo 4 de mayo. Según el Ejército, el NEP recaudó cerca de 140 millones de pesos el año pasado por medio de la extorsión a políticos, empresarios, terratenientes e incluso propietarios de pequeños negocios.

La guerrilla comunista del NEP lucha contra el gobierno central de Manila desde 1969, lo que le convierte en uno de los grupos terroristas de inspiración maoísta más antiguos de toda Asia. Sus objetivos son fundamentalmente las fuerzas de seguridad, políticos, jueces, informadores del gobierno y antiguos miembros arrepentidos del NEP. Se oponen a cualquier presencia estadounidense en Filipinas y han asesinado a varios ciudadanos estadounidenses y atacado las bases militares de ese país antes de su clausura en 1992.

En 2008, tras la destrucción de 13 bases de la guerrilla en 2007, se estimó que su número de miembros apenas alcanzaba los 5.700 activistas, el nivel más bajo en los últimos veinte años y notablemente menor a los 25.000 con los que contaba durante los años ochenta. El teniente coronel Brawner aseguró que 14 provincias serán declaradas libres de insurgentes del NEP para finales de este mes y se espera que otras nueve más lo sean en Junio

Las conversaciones de paz entre rebeldes y gobierno, mediadas por Noruega, se quebraron en 2004 después de que los guerrilleros se retiraran tras responsabilizar al Gobierno filipino por la inclusión del NEP en las listas de grupos terroristas de Estados Unidos y la Unión Europea.
 

Secciones

Subscriptores

Copyright © 2012 Semanario de Filipinas